Amaneceres distantes
¿tus ojos percibirán lo mismo que los míos?
Tus ojos…ya no me miran más
¿Y puedes ver estos destellos rojizos?
El alba rompiendo lo que queda del anochecer
¿puedes sentirlo dentro de tu sangre?
La luna escapa sin prisas despidiéndose también
El tiempo se encoje entre mis manos
Se aprieta contra mi pecho y me pesa en los
suspiros
El tiempo viene en forma de recuerdos
Y de pronto, se queda estático, mudo y sin forma
Ya no entiendo nada de la vida
Ya no entiendo nada del destino
Las nubes en el cielo no se desvanecen
Y el brillo del sol se va elevando
Pasaran las horas entre mis dedos apresurados
Por tratar de desentrañar los misterios que me
quedan por vivir
El día se irá marchitando, hasta volverse polvo
Y entonces vendrá de nuevo la sombra de tu recuerdo
A preguntarme sí ya te he olvidado.