He sentido la mano inerte
Atravesar mi pálida alma
A altas horas de la
madrugada
Llamando con seductora
lasciva
Desde el fondo del abismo
Invocando antiguos miedos
Estampados en mi retina
EL corazón en desvelo
Agitado en cada latido
Expectante a cada
movimiento
Allí estás tú de nuevo
Deja ahora que mi sangre
Corra una vez más a través
de tus venas
La noche de un azul
profundo
La mezcla del infinito e
incertidumbre
Las emociones que florecen
en tu vientre
Son raras mariposas que
vivirán eternamente
Nos acompañará por siempre
Está tortuosa maldición
Es nuestro destino
“-No te despojes de tus
pensamientos-“
“-No me olvides nunca-”
Te grita mi pasión
enardecida
