lunes, 12 de diciembre de 2016

Ya no me lastimas.

Ya no me quema
el frío fuego 
De tu indiferencia
Ni tampoco me mata ya
Que tu vida no sea más mía

Que tus palabras 
Tu voz y tu juego
Ya no me quieran a mi

La soledad 
Me va ayudando a olvidarte
Cuanto más me engulle el silencio
Más es tu nombre 
Un recuerdo distante

Que así sea 
Y que la penumbra
Absorba cada parte
De tu rostro
Hasta ya no mirarte

Ya no me duele
La espina que clavaste
Poco a poco 
Ya no me duelen
Las heridas en el alma